27 de noviembre de 2012

Cometas.

Entre las piedras del espacio, tropiezo al despegar, tropiezo al despegar... Las pusieron todas a mi paso... Me quieren derribar, me quieren derribar.

Lo que digan la verdad, son líneas paralelas que nunca convergirán, van en dirección opuesta. No quieren que vaya a rescatarte... Nos quieren separar, nos quieren separar.  Cuando el tiempo haga de juez y dicte lo que hay que hacer, volveremos a brillar con toda la intensidad.

Ella da la vuelta y voy sangrando... Nadie me va a curar, nadie me va a curar. Y en mi sacramento voy rezando... Nadie me va a escuchar, nadie me va a escuchar. Cuando el cielo vuelva a arder justo antes de atardecer, volveremos a brillar en toda su inmensidad.

Haciendo de nuestras vidas dos cometas que giran volando rápido entre planeta, batiendo las alas alto esquivando estrellas dejando en el universo nuestras estelas hasta el Sol, hasta el Sol, hasta el Sol...

¡Que nadie pueda nunca separarnos!

¡Que nadie pueda nunca separarnos!
¡Que nadie pueda nunca separarnos!


26 de noviembre de 2012

Turnedo

Desde aquí desde mi casa veo la playa vacía, ya lo estaba hace unos días, ahora está llena de lluvia. Y tú ahí sigues sin paraguas, sin tu ropa, paseando, como una tarde de julio pero con frío y tronando. ¿Se puede saber qué esperas? ¿Que te mire y que te seque? ¿Que te vea y que me quede tomando la luna juntos? La luna, tú y yo expectantes a que pase algún cometa o baje un platillo volante.

Y la playa llora y llora, y desde mi casa grito que aunque pienso en abrazarte, que aunque pienso en ir contigo, el doctor me recomienda que no me quite mi abrigo, que no esté ya más contigo y yo no puedo negarme pues el tipo soy yo mismo. Estudié mientras dormías y aún repaso las lecciones, una a una, cada día. Yo no puedo aconsejarte, ya es muy duro lo que llevo, dejemos que corra el aire y digámonos adiós.

Aunque siga suspirando por algo que no era cierto, me lo dicen en los bares: Es algo que llevas dentro, que no quieres que te quieran, sólo quieres que te abracen y publicas que no tuve ni valor para quedarme. Yo rompí todas tus fotos, tú no dejas de llamarme.

¿Quién no tiene valor para marcharse?
¿Quién no tiene valor para marcharse?
¿Quién no tiene valor para marcharse?


¿Quién prefiere quedarse y aguantar?

Marcharse y aguantar.